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3 DE JULIO DE 1966

Los Beatles volaron a Hong Kong, donde los retuvieron en el salón VIP, mientras su avión se recargaba de gasolina para continuar su viaje hasta Manila en las Filipinas (que estaba para entonces, bajo el régimen dictatorial de Ferdinando Marcos). Cerca de 50.000 fans los esperaban para saludarlos. Los Filipinos, que habían estado atentos al comportamiento de las autoridades japonesas, no quisieron ser menos. Con su típica rudeza, los policías militares irrumpieron dentro del avión y arrastraron a cada uno de Los Beatles por las escaleras para mantenerlos bajo custodia. Dos batallones totalmente armados para combatir, se llevaron a Los Beatles hasta el cuartel general para resguardarlos antes de tranferirlos a un yate privado, donde el multimillonario filipino, Don Manolo Elizalde, dio una fiesta en su honor rodeado de sus ricachones amigos. No fue sino hasta las 4:00am que Brian Epstein recuperó el control de la situación y Los Beatles finalmente llegaron a su suite en el Hotel Manila. George recuerda: “aquellos gorilas, unos tipos inmensos, con camisas de mangas cortas, nos sacaron del avión confiscaron nuestro “equipaje diplomático”, tomaron todo lo que era nuestro. A John, Paul, Ringo y yo sin Brian o Neil o Mal, nos llevaron hasta un bote en Manila Bay y estábamos rodeados por anillos de policías armados por todas partes. Inmediatamente pensamos que nos habían arrestado porque habían encontrado la droga que llevábamos escondida en nuestros maletines de mano”.

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