Se transmite por Capital Radio una entrevista con Paul para promover su nuevo single.
En Liverpool, el consejo de la ciudad finalmente decide que una estatua funcionaría como tributo a los "hijos favoritos" de la ciudad y que ésta será erigida en Williamson Square. Se decide que la pieza será fundida por Brian Burguess quien tendrá un patrocinio de £25,000. El antiguo manager de Los Beatles, Alan Williams, es asignado para recolectar el dinero. Al momento, un vendedor de alfombras nostálgico de nombre Spencer Lloyd Mason, que alguna vez manejó al grupo de los sesenta, The Mojos, prometió £5,000. Desafortunadamente, la situación no complace del todo a varios miembros del consejo. Uno de ellos inclusive comentó: "Los Beatles hicieron mucho dinero y no los hemos visto desde entonces". Otro canciller conservador, cuya posición es también en contra, dijo: "¿Los Beatles? No cantarían por un caramelo". Un vocero de la corriente liberal manifiesta su desacuerdo: "¿Pueden imaginar a Viena con la misma actitud en relación a Strauss?". También se da a conocer que el Instituto Real de Arquitectos Británicos ha prestado su nombre para una competencia en la cual se darán ideas para el nuevo diseño del centro de la Ciudad de Liverpool, que incluye a Mathew Street, la antigua casa del ahora demolido Cavern Club.
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